Portfolio
Hilda Lizarazu - Pompi Gutnisky
Curaduría y texto Bruno Dubner
Junio 13/2023 - Julio 28/2023
Pompi Gutnisky, 1989 | Toma directa. negativo color, C-print | 40 x 60 cm
Los destinos y propósitos, ya no únicamente de las fotografías sino de cualquier tipo de imagen – en términos estrictos de cualquier tipo de objeto - nos resultan esquivos.
Las más variadas voluntades intentan forzar a una fotografía para que se adecúe a un cierto código – esto es publicidad, aquello moda, ahí el periodismo, más cerca el mundo editorial – pero ella, sinuosa, artefacto sin destino ni domicilio fijo, escapa al tiempo, rehúye de los designios más férreos del sometimiento óptico. Su latencia primigenia perdura en un más allá exento de eurekas epigráficos: una fotografía no cede, no caduca ante el sentido enigmático que tan abiertamente presenta en su llenado total; en su completitud obturada de vacío. Todo se ve, nada se nos dice.
Gitanas en sus carretas de aquí para allá, a cuestas con su canto sin país; parias indocumentadas obligadas a presentar alguna clase de papel oficial ante un control de fronteras atemorizado por el nomadismo de las vivaces aventureras.
Es así entonces, entre los vaivenes de las certificaciones y las credenciales como la Fotografía vive, enfática y perseverante, sirviendo a diversas finalidades sin diferencias sustanciales entre las unas y las otras; indiferente. Son siempre los mismos dispositivos con independencia de lo que enfrenta la lente; da igual si es la luna, un rostro, un automóvil o cualquier otra escena vehemente.
Cuan poco criteriosa; ahí su poesía.
¿Qué mejor ámbito entonces qué las artes para que las fotografías, ahora sí liberadas, ofrezcan las secuelas de su belleza? ¿Acaso alguna otra atmósfera tan propicia a la de esta prepotencia para revisitar cualquier otra cosa desde la impunidad que únicamente otorga este otro lado?
Las obras solo rinden cuentas ante lo que ellas establecen. Previo a ellas, nada.
Así son las fotos de Hilda, quien es fotógrafa-fotografía de si y de una mujer que también es ella y otras; y las de Pompi, para quien la cámara - y todo lo que con ella se pueda hacer – nunca guardó secreto alguno.
Libres y atemporales, vívidas y perspicaces, desatentas a los propósitos y a los instantes del clic, todas estas son fotografías que no solo testimonian algo, sino que aún más lejos y antes que cualquier otra cosa, documentan dos formas de mirar al mundo.
Ante estas dos maneras me entrego, ya sin palabras, perdido en mi fascinación.
Bruno Dubner, artista fotógrafo
Mayo 2023