Tramo se complace en presentar la cuarta edición de La Casa Invita, una propuesta que busca mostrar a los artistas de la galería en diálogo con artistas invitados. En la edición anterior la galería presentó su nueva identidad, Tramo, un nombre que simboliza el recorrido, los aprendizajes y las experiencias que han moldeado el proyecto. Para seguir afianzando esta visión, catorce artistas de diferentes galerías fueron invitados a participar de esta muestra. El eje curatorial de este año está orientado a explorar la diversidad de trayectorias, presentar las distintas búsquedas y las prácticas de cada uno. Muchos transitaron la misma formación académica, compartieron clínicas o becas, o tuvieron como referentes a los mismos artistas. A veces en simultáneo o en distintos momentos. Algunos en Buenos Aires desde siempre o por períodos, algunos en otras provincias o desde otros países.
El presente se encuentra atravesado por un nuevo paradigma que concibe el agenciamiento y la colaboración como prácticas estéticas. En este sentido, frente a un contexto que por ratos parece paralizante o puede llegar a aturdir, el gesto está en crear estas experiencias de colaboración. La idea de emergencia adquiere una lectura que se suma a la de surgimiento de lo nuevo y de urgencia: es también la capacidad de responder con cierta creatividad compartida, con ciertas manifestaciones sensibles, a los desafíos actuales. El proyecto no se plantea como una exhibición de respuestas concluyentes, sino como un espacio en construcción donde las relaciones entre obras, artistas, galerías y contextos evidencian la riqueza y el dinamismo de la escena local.
Esta muestra también funciona como una excusa para hablar del trabajo de curaduría de los equipos de las galerías y sus artistas. Una suerte de dispositivo para hablar de un detrás de escena muy fascinante: las visitas a los talleres a lo largo del año, las conversaciones extensas, las planificaciones cuidadosas, los éxitos y los fracasos, los encuentros y desencuentros, y las experiencias compartidas en ferias y muestras. En estas instancias, la curaduría emerge como un acto de escucha, donde los entusiasmos y las inquietudes se alinean. La Casa Invita es una instancia para reconocer trayectorias compartidas y tiempos diversos, para celebrar y crear otros presentes más vivibles. Un ensayo para fortalecer los lazos entre quienes impulsan el arte y crear desde esa síntesis de esfuerzos.
Charlie Suárez Medrano
enero 2025