HERNÁN PAGANINI (1982)

Retrato Hernán Paganini

b. 1982, Zárate, Argentina.

Graduado de Diseño Gráfico en la Universidad de Buenos Aires. Interesado en explorar otras aplicaciones de su trabajo, cursó el taller Antiproyecto, dictado por Diego Bianchi en la Universidad Di Tella, como así también el Taller de Concepto, a cargo de Daniel Joglar y Erika Escoda, ambos en el año 2009. Formó parte del Programa de Artistas en la Universidad Torcuato Di Tella, (edición 2010/11), coordinado por Pablo Siquier y Leopoldo Estol. Participó en las residencias internacionales El Ranchito, Matadero, Madrid, España (2015), Kiosko Galería, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia (2016), Bienal del Sur, Venezuela y el Programa de Residencias para Artistas de Facebook (2017).

Su trabajo ha sido exhibido en ferias nacionales como ArteBa, MAPA, e internacionales como ART RIO, ART TORONTO, ART ON PAPER, New York, DRAWING ROOM, Portugal, SWAB FAIR, España y PINTA Miami.

Vive y trabaja en Seattle, Estados Unidos.

Lo único certero que siento por estos días es que todas las mañanas despierto con otra forma. Mi trabajo pulsa en la relación entre naturaleza y cultura, desarrollando en el hacer nuevos recursos para construir un tipo de conocimiento concreto y salvaje, ya que con medios arte-sanales en un nuevo contexto es posible confeccionar herramientas que son también modos de conocimiento. Exploro la relación entre los lugares, sus historias y la construcción de nuestras propias subjetividades sobre la idea de herencia y memoria, trabajando a través de objetos recuperados y encontrados, productos del descarte de la sociedad como rastro de su gesto inconsciente, los cuales cargan simultáneamente con una historia ajena y propia, individual y colectiva. Indagando en estos vértices sobre la premisa del compartir, yuxtaponiendo mismas acciones sobre diversas estructuras sociales, transmutando el concepto de la supuesta diferencia cultural en una herramienta de sentido artístico.

En las esculturas, instalaciones y collages de materiales que produzco, los fragmentos se yuxtaponen, escalonan, raspan, enfurecen, acercan, niegan, afirman, se construyen y reconstruyen en nuevas interpretaciones posibles; un nuevo léxico de malentendidos, acciones que intentan producir nuevas preguntas, desaprender lo aprendido y pensar nuevamente sobre de qué manera nos relacionamos con los demás, con el sistema que habitamos y con los objetos de consumo diario. Intento poner en escena la valoración de lo incompleto en la posibilidad estética de la belleza como un estado atemporal, y que no podemos abarcar si no es a través de nuestra propia imperfección.